El secretario general de Infraestructuras del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Sergio Vázquez Torrón, ha participado esta mañana en la jornada “Reflexiones sobre un futuro sostenible: la nueva Ley de Movilidad Sostenible y Financiación del Transporte”, en el marco de la 2ª Edición del Barcelona New Economy Week (BNEW), que se celebra desde el pasado día 5 y que clausura esta tarde la ministra, Raquel Sánchez, en la capital catalana.
En este escenario, el secretario general de Infraestructuras ha defendido la nueva Ley de Movilidad Sostenible y Financiación del Transporte, que servirá para avanzar en el objetivo de descarbonización del transporte y de las ciudades, y que “será junto a los fondos europeos la oportunidad para dar un salto de gigantes a la movilidad sostenible”.
Vázquez Torrón ha recordado que el transporte es el responsable del 29% de los gases de efecto invernadero en España y que, por tanto, es necesario realizar un cambio en el modelo de movilidad y un cambio en el concepto de las infraestructuras tal y como las conocemos.
De esta forma, ha añadido que este cambio de paradigma se basa en transformar las ciudades, pasando de una ciudad enfocada al coche a una ciudad que prioriza las personas. “Tenemos que pasar de un Siglo XX en el que la inversión se planificaba en base al hormigón, a un Siglo XXI en el que se planifica en base a los datos”, ha concretado.
El secretario general ha señalado que las infraestructuras “deben ser una herramienta, no un fin en sí mismo”. Ello conlleva invertir en mejoras en conservación y mantenimiento y asegurar una financiación de las mismas, donde “la tarificación será una herramienta para internalizar los costes externos medioambientales”.
Las nuevas tecnologías, además, permitirán limitar la creación de nuevas infraestructuras con soluciones tecnológicas, como pueden ser los carriles reservados digitales, ha ejemplificado el secretario general de Infraestructuras.
Por último, Vázquez Torrón ha destacado que “estamos actualmente inmersos en un círculo virtuoso, que se inició con el cambio de denominación del Ministerio -un cambio de visión y de concepto de cómo entender la movilidad más allá de las infraestructuras- y ha continuado con la Ley de Movilidad Sostenible y de Financiación del Transporte y la llegada de los fondos europeos. Si a esto le sumamos la capacitación de nuestras empresas, líderes en el campo del transporte y el cambio social, transitamos a una segunda transformación en el campo de la movilidad”.