El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) va a ejecutar la reparación de los desperfectos ocasionados por los desprendimientos de rocas de grandes dimensiones en el P.K. 434+500 de la carretera N-340A, que obligó a desviar el tráfico afectado por la autovía E-15/A-7.
Los trabajos comenzarán la primera semana de febrero y tendrán un presupuesto de 639.224,12 €.
En esta actuación se propone la combinación de dos sistemas de protección que se aplicarían en unos 120 metros a lo largo de la traza, que son:
Previamente a la instalación de dichos sistemas, hay que realizar un saneo de las coronaciones de los diferentes frentes de talud, eliminando las piedras y bloques que estuvieran en situación inestable. De forma complementaria, hay que reparar la malla de triple torsión existente, y colocar malla nueva en aquellas zonas donde no existiera, para la colocación posterior de la cortina de guiado.
Se espera que se restablezca el tráfico en el tramo del Cañarete en aproximadamente tres meses.